"Aquel cuyo nombre está escrito en el agua". Epitafio en la tumba de John Keats.
lunes, 4 de abril de 2016
POETAS ROMÁNTICOS INGLESES: CANTO XIX
- Ya debo irme... Peinando sus cabellos
está la Aurora y los zagales
entonan sus canciones
camino de las viñas
y la sangre dorada de las uvas.
¡Me gustaría tanto
quedarme aquí, contigo,
abrazada a tu torso
como un bronce que late...!
Pero no me es posible, mi Vida.
- Nadie te robará de mí,
secreta, ardiente joya
encerrada en mi pecho,
divina luz que alientas
y das el ser a lo que antes
eran tan sólo sombras.
Aunque tus pasos te alejen
de mi piel, tu corazón se queda,
igual que el mío en el tuyo...
- Es apasionada tu voz,
dulce como la miel de las ilusiones,
y despiertas inquietudes
que yacían olvidadas
bajo las hojas muertas de los años
y los sufrimientos.
Mis pupilas, mientras marcho,
se vuelven a buscarte,
porque no quieren perder
la razón de su gozo.
- Por mucha niebla
que pueda acumular la soledad,
por mucha herida
que nos cause la deriva del otoño
o el miedo de la tumba,
por mucha penitencia
que aguarde a nuestras almas,
seguro estoy de que valió la pena
en esta ribera de dunas llorosas
devorar en tus labios mi destino...
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Poema "dialogado", a dos voces, como se hacía en otras épocas no tan lejanas en lo literario como a primera vista puede pensarse.
ResponderEliminarPerfecto,Rafael. Siempre un enorme gusto leer de tu estro y pluma.
ResponderEliminarGracias, querida amiga. También es un placer para mí recibirte en mi blog.
EliminarBrillante composición, Rafael. Un saludo.
ResponderEliminarMuchas gracias, amigo, tus palabras siempre son bienvenidas.
EliminarGracias a ti por compartir.
EliminarDe nada.
EliminarGracias, poeta. Un abrazo!
ResponderEliminarDe nada, es un placer.
EliminarGracias.
ResponderEliminarDe nada, amiga.
EliminarGracias, Rafael!!! Browning es uno de mis favoritos, una joya.
ResponderEliminarAsí es, a mí me gusta mucho también.
EliminarHaces que me conmueva, un poema exquisito que me deleita al leerlo!! Un río de palabras románticas!!! Una preciosidad!!! Gracias, eres admirable!!
ResponderEliminarGracias yo a ti por esas palabras tan bellas dedicadas a mi obra.
EliminarMil gracias, Rafael... hermosa, me encantó. Cuando el amor toca el alma ya no son dos, son sólo uno. Toda la vida.
ResponderEliminarLa unidad de cuerpos y de almas... eso es el amor.
EliminarAsí es, un mismo sentir.
EliminarY un mismo esperar.
Eliminar"Devorar en tus labios mi destino"... Cuánta pasión, querido Rafael. Hermoso e interesante. Puedo imaginar la lectura, el escenario, la teatralidad. Gracias por compartirlo. Un abrazo.
ResponderEliminarSí, hay algo de eso, el poema está concebido como un diálogo teatral. Agradecido siempre por tus comentarios.
EliminarSentido diálogo poético, sin duda... gracias Rafael.
ResponderEliminarEl sentimiento manda... el poeta obedece. Un placer, Magda.
EliminarRealmente hermoso, me encantó... Es una delicia leer tus letras tan llenas de sentimiento. Gracias, amigo.
ResponderEliminarMayor delicia aún es compartirlas con quien, como tú, las sabe apreciar. Yo te doy las gracias a ti.
EliminarVivencia de sentimientos encontrados, intensa nostalgia de un secreto amor especial, hermoso poema Rafael, gracias siempre poeta.
ResponderEliminarCelebro que te haya gustado y es un placer, amiga.
Eliminar"como un bronce que late"...
ResponderEliminaruna imagen bien elocuente.
ResponderEliminarUn bronce que puede hablar sin palabras. Gracias, amigo.
EliminarExcelente tema, con gusto, exquisitez, y llega a todos.
ResponderEliminarMuchas gracias, procuro que mis poemas tengan esos ingredientes, aunque no siempre es fácil reunirlos.
EliminarTengo, una de dos, o pocas palabras para definirlo, o estaría escribiendo sobre tus cualidades literarias largo rato, no porque entienda sino por todo lo que transmite, más bien desde lo emocional, que de eso sé bastante.
ResponderEliminarSólo te diré que me emociona tu poema. Es espectacularmente bello. Un abrazo de admiración, querido amigo.
Esas experiencias emocionales son comunes a todas las personas. El único mérito del poeta estriba en darles forma a base de palabras. Gracias por tu cálido comentario.
EliminarFino tejido de imágenes y de la sutil música desprendida de ellas, da gusto posar los ojos en esa orfebrería.
ResponderEliminarElogioso comentario que te agradezco mucho, amigo.
Eliminarun poema maravilloso... lo he leido muchas veces
ResponderEliminarPues eso es muy grato para mí.
Eliminares que tus versos lo merecen
EliminarGracias como siempre, Julia.
EliminarDe Robert Browning llama la atención en primer lugar su familia acomodada, que le permitió llevar una vida de poeta itinerante sin demasiadas estrecheces económicas, compaginando la composición y los estudios de lenguas clásicas. En segundo lugar, su pasión por Italia, país al que viajó con frecuencia y en el que murió, concretamente en la ciudad de Venecia.
ResponderEliminarTambién destaca, como creo que hemos dicho aquí alguna vez, su matrimonio con la excelente poetisa Elisabeth Barrett, que duró 15 años, hasta la muerte de ella.
EliminarSí, el matrimonio en este caso fue una influencia mutua y muy positiva desde el punto de vista literario... algo que no suele ser frecuente
EliminarElla le dedicó sus "Sonetos del portugués", uno de los más hermosos ejemplos de la lírica en lengua inglesa. Si puedes te recomiendo que los leas, Roberto.
EliminarGracias Rafael Simarro por ese bronce entrelazado de tu obra.
ResponderEliminarDe nada, Guadalupe. Es un placer como siempre recibirte aquí.
EliminarInnegable la solidez de esas dos voces, Rafael. La sutileza dialogante de esas almas enemoradas. Debo reiterarme en lo ya dicho, leerte es sorprenderse en expresión y belleza. Un aplauso amigo.
ResponderEliminarBesos.
Quizá haya que prestar una mayor atención a los "duetos", Antonia. Creo que la poesía "a dos voces" es un filón por explotar. Muchas gracias, porque cada entrada tuya es una invitación a seguir creando. Besos.
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