"Aquel cuyo nombre está escrito en el agua". Epitafio en la tumba de John Keats.
martes, 23 de junio de 2015
PRESENCIA
¿No parará tu abeja de rondarme
con sus tenues violines misteriosos
ni entre retornos cálidos, melosos,
las arras de tus labios de entregarme?
¿No dejará tu canto de hechizarme
en los estrechos pasos insidiosos
donde encalla mi vida ni en los fosos
de turbulentas olas de encelarme?
Soy tu constante regresar de ronda.
En mi llanura de reseco esparto
corolas abro bajo tu colmena.
Vivo en tu voz indómita, redonda.
Podrán crecer escollos en mi cuarto,
pero quiero abrazarte, mi sirena.
jueves, 4 de junio de 2015
LA CITA
Fue tu pulsión, de ávida pianista,
la derribada cárcel de mis hierros;
tu tacto puso en claro oscuros yerros
y fue el azúcar de la dura arista.
El ocaso pasaba amarga lista
y se vaciaba de dolidos perros
cuando tú prolongabas por mis cerros
tu callada ascensión, tu escoplo artista.
Vibró bajo tus olas deseantes
mi ser, como una playa acariciada
por espumas de rojos estertores...
¡Búscame, Amor, con yemas incesantes,
que yo tendré por siempre preparada
una piel para ti llena de flores!
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