miércoles, 3 de septiembre de 2025


La historia de España no puede limitarse al estudio de lo que sucedió dentro de las fronteras de nuestro país. Si así fuera, hechos como el descubrimiento de América, la batalla de Lepanto, el concilio de Trento o la expedición de la Invencible quedarían descartados injustamente. Por tanto, de lo que se trata en realidad es de la "historia de los españoles", verdaderos protagonistas de los acontecimientos del pasado. Pero no hay que olvidar tampoco que estos españoles le deben su nacimiento a España y en ella han adquirido su lengua, su religión, su cultura, su temperamento y forma de ser.

La Península Ibérica se encuentra en uno de los lugares más estratégicos del mundo: un puente tendido entre Europa y África, por donde han pasado docenas de invasiones e influjos culturales, en uno y otro sentido; también el paso del Atlántico al Mediterráneo, y viceversa. En torno a estos dos grandes ejes de tensión bascula toda la historia de España. Se diría que los españoles del pasado se vieron siempre forzados a escoger, aunque, en ocasiones, como en los inicios del siglo XVI, se sintieron impulsados de tal dinamismo que optaron por todo a la vez.
La Península, por otra parte, posee una singularidad perfectamente definida. El istmo pirenaico sólo representa una séptima parte de su contorno total, por lo que el territorio peninsular resulta casi una isla, y dicho aspecto de aislamiento frente al mundo necesariamente ha proporcionado a los españoles el sentido de pertenencia a algo común. Por si fuera poco, España encierra dentro de sí misma una sorprendente variedad en su clima, orografía, flora, fauna, paisajes... hombres. Alguien la ha llamado "continente en miniatura". Y lo cierto es que nuestro país contiene, en sus modestas dimensiones, contrastes más violentos que todo el resto de Europa junto. En cuanto al elemento humano, la pluralidad de costumbres y, en muchos casos, de lenguas no deja de ser llamativa si la comparamos con la de otras naciones. Esta otra tensión entre unidad y diversidad es también una constante de la historia española que en ningún momento se puede perder de vista.
Fuentes: "Historia de España Moderna y Contemporánea" (José Luis Comellas, Universidad de Sevilla).
Imagen: "Las tres carabelas", cuadro de Rafael Monleón (siglo XIX).

3 comentarios:

  1. Que somos un “ continente” , con solera y valentía, con furia de la buena, y, gente maravillosa, nadie lo puede dudar. Creo que hemos nacido en una de las partes más maravillosas del mundo, y que nuestros antepasados han hecho historia de la que nos sentimos orgullos. Aquellos si, nos representan.

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    1. En esta serie de capítulos voy a tocar diversas cuestiones de historia española, desde los Reyes Católicos hasta prácticamente la actualidad. Mi intención no es elaborar un tratado exhaustivo, para lo cual, además, me faltarían tiempo y espacio. Lo que pretendo, en la medida de mis posibilidades y de mi entendimiento, es responder a cierta pregunta que me inquieta desde hace bastantes años: ¿cómo es posible que una nación que ha sido tan grande, que ha logrado tanto pese a sus limitados medios y que no sólo ha regido el mundo, sino que también ha difundido su visión espiritual de ese mundo, haya caído en la insignificancia que ahora contemplamos y en la ausencia de peso y de vigor moral? Me parece un tema decisivo, merecedor de largas reflexiones. El trabajo del profesor Comellas (recientemente fallecido) resulta una guía excelente. Espero que sea de interés para los lectores. Dicho lo cual, gracias por seguir ahí, Nieves.

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  2. Francisco J. Fernández Camacho3 de septiembre de 2025, 11:13

    Rafael Simarro Sánchez, como dijera Bismark "España es la nacion mas fuerte del mundo, lleva siglos intentando destruirse y no lo ha conseguido; cuando deje de hacerlo y responda de forma unitaria será la mas poderosa de las naciones"

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